1 al 14 de marzo de 2019
Queriendo hacer una experiencia relacionada con el Pathways, camino que se está llevando adelante por todos los gen del mundo como consecuencia de la propuesta realizada en el Gen-Fest de Manila y que pretende ayudar en las necesidades locales, hemos visto la posibilidad de colaborar con un colegio de Aljucer con escasos recursos materiales.
En la comunidad local hemos pensado en varias ocasiones como hacer y teniendo varias opciones hemos pensado en trabajar por ayudar a este colegio.
Varios adultos de la Comunidad Local se han puesto a colaborar conmigo. Unos haciendo el cartel, otros difundiendo la idea, otros recogiendo material y por último un voluntario, Antonio Gil, me acompañará al colegio a llevar el material recogido.
Antes de ponernos en marcha, nos pusimos en contacto con el director del colegio para preguntarle si le parecía bien que ayudásemos de alguna manera y en qué podíamos hacerlo. Nos propuso recoger material escolar y llevárselo personalmente a los niños para que se diesen cuenta de la solidaridad de los demás para con ellos.
La fase de recogida de material acabó con la actividad #Cineando que llevamos a cabo también desde la asociación y que está orientada a los jóvenes a los que invitamos a que mostraran su solidaridad con el centro educativo.
Para finalizar esta recogida de material fui al centro junto con Jose María y en el que el director sacó al patio a algunos niños para que vieran la solidaridad que personas del pueblo y no del pueblo han mostrado con ellos. Para esto les dijo de manera adaptada a ellos que como muchas veces los padres no puede sufragar los gastos de material por el motivo que sea que hay gente que quiere ayudarlos y que la forma de hacerlo es llevándoles material escolar básico, aunque esta vez además de material también les llevamos libros de lectura, así han podido ampliar también la biblioteca del colegio.
Este momento para mí fue el más bonito de la experiencia. Cuando vi la cara de los niños en el momento que les dijimos que había siete cajas y una maleta llenas de material les cambió la cara. En algunas caras se veía sorpresa, en otras agradecimiento y fue súper gratificante para mi haber hecho esta experiencia y supongo que como futura docente me he dado cuenta que estos niños, por pequeños que sean saben lo que es pasar necesidades y aprecian cuando se les da algo y aunque suene duro es muy bonito poder ayudarlos y espero que en el futuro se puede volver a hacer.
Para finalizar, agradecer a todos los que han participado, haciendo el cartel, dando material, difundiendo la noticia o dejando poner carteles en su local ya que sin todos ellos no habría sido posible llevar todo esto a cabo así que gracias a cada uno de vosotros.
Isa Zaragoza
